México y el virus que muere en soledad
Marta Durán de Huerta, Radio Nederland"No salude de mano o beso. No acuda a lugares concurridos. Lávese las manos constantemente con agua y jabón. No se acerque a las personas que tosen y estornudan. Si va a estornudar o toser, tápese la boca y la nariz con un pañuelo de papel. Desinfecte con cloro o alcohol palancas, mesas, juguetes, teléfonos, teclados de computadora y el inodoro. Use tapabocas cuando salga a la calle. No comparta cubiertos o platos con nadie. Extreme las medidas de higiene." Estas son las principales recomendaciones que se transmiten continuamente en México y en Estados Unidos para evitar que la epidemia de influenza porcina siga creciendo.
Los síntomas son fiebre repentina superior a 39 grados, un intenso dolor de cabeza y muscular, estornudos, tos, dolor de garganta, fatiga, diarrea y vómito. Si usted tiene dos o más de esos síntomas, acuda al médico, no se automedique.
AN1H1 es desconocido
El virus AN1H1 es desconocido. No hay vacunas. Parece ser que se trata de una nueva mutación. Algo así como un coctel de virus de la gripe aviar, de la influenza humana y de la porcina.
Las autoridades sanitarias intuyen que el contagio se da de persona a persona por lo que en seis estados de México, empezando por la capital, todas las escuelas han sido cerradas y así permanecerán hasta el 6 de mayo. Se suspendieron conciertos, obras de teatro, eventos deportivos. Los cines, museos, bares e iglesias cerraron. Incluso las finales del fútbol se realizaron a puerta cerrada y se transmitieron por televisión.
El Estadio Azteca, por ejemplo, con cupo para más de cien mil espectadores estuvo vacío y durante el partido sólo se oyeron las voces de los jugadores. Las calles están vacías en la ciudad más poblada del mundo, pero los hospitales están abarrotados.
El virus que muere en soledad
Los médicos estiman que el virus AH1N1 muere si no llega a los seres humanos, de ahí la importancia de la higiene extrema y de evitar el contacto con otras personas y sus mucosidades. La tos y los estornudos funcionan como aspersores que lanzan con fuerza mucosidades con virus en todas direcciones. Si el virus no llega a otra persona, muere.
Los jóvenes sanos y fuertes, las principales víctimas
A diferencia de la influenza humana que ataca a bebés y viejos, la influenza porcina ha hecho que los jóvenes saludables y fuertes de entre 20 y 40 años sean sus víctimas. Esto aún no lo han podido esclarecer los científicos.
Estados Unidos se declaró en "emergencia de salud pública" mediante una conferencia de prensa que ofreció el domingo 25 Janet Napolitano, la Secretaria de Seguridad Interior norteamericana. "Estamos seguros de que, al buscar más casos por todo el país, los encontraremos. El comportamiento del virus es impredecible, pero el número de afectados irá subiendo. Y esperamos ver casos más severos", dijo a la prensa el director interino del Centro de Control de Enfermedades, Richard Besser.
Estados Unidos ya detectó 20 casos de influenza porcina y las pruebas de laboratorio muestran que se trata del mismo virus que el que afecta a los mexicanos. Sin embargo, ninguno de los pacientes norteamericanos ha muerto en tanto que en México, hasta el momento de redactar estas líneas van 103 decesos. Según las cifras oficiales, en México hay mil 614 casos en todo el país.
No se sabe cómo el virus que afectaba a los cerdos pasó a los hombres y cómo fue la mutación para que se diera el contagio de humano a humano.
La Organización Mundial de la Salud en alerta media
La Organización Mundial de la Salud afirma que esta epidemia es un asunto de salud pública internacional. La OMS estableció una oficina especial para monitorear el desplazamiento del virus y su comité de emergencia tiene reuniones permanentes. Margaret Chan directora del organismo afirmó a la prensa que aún es demasiado pronto para saber si la epidemia se convertirá en pandemia, es decir que cruce fronteras y continentes.
La situación es grave, impredecible, y evoluciona de prisa, dijo la experta. Ella conoce el problema pues desde la OMS enfrentó la gripe aviar en 1997. Chan recomendó que todos los países intensifiquen la vigilancia de casos fuera de los común y agregó: "Esta es la primera vez que vemos una cepa aviar, dos porcinas y una humana"
La OMS activó desde la noche del viernes un sistema de gestión de situaciones de urgencia y envió un equipo con expertos a México. El martes próximo el organismo internacional anunciará si decreta o no la alerta internacional por peligro de pandemia y reconoció que el brote tiene la potencialidad de una.
La OMS recomienda el uso de retrovirales para ayudar al paciente. Las sustancias activas son oseltamivir y zanamivir pero de ninguna manera nadie debe automedicarse. Sólo las pruebas de laboratorio pueden determinar si una persona tiene el virus A H1N1 o tiene un resfriado común y corriente. La fiebre porcina es curable si se detecta a tiempo.
El virus que viaja en avión llega más rápido
Los gobiernos de Canadá, Estados Unidos, España, Nueva Zelanda, informan a la OMS haber encontrado algunos casos de fiebre porcina en personas que estuvieron recientemente en México.
Nadie ha cerrado sus fronteras a México ni México impide el paso a nadie, aunque Rusia, Hong Kong, Italia, Polonia, Venezuela y Corea del Sur recomiendan a sus ciudadanos no venir a la Ciudad de México.
Japón ha instalado en la puerta de los aviones provenientes de México y Estados Unidos, un aparato que mide el calor corporal de una persona, para detectar a quienes lleguen con fiebre y aislarlos.
Guatemala, El Salvador, Panamá y Nicaragua, declararon el viernes pasado alerta sanitaria
A principios de marzo del 2009, los primeros casos de fiebre porcina se identificaron en el sur de California, Estados Unidos y San Antonio Texas, pero no se sabe cómo llegó a la Ciudad de México y por qué aquí se convirtió en una epidemia.
El gobierno no tiene defensas
Las políticas neoliberales de los últimos sexenios tuvieron como objetivo desmontar al Estado, privatizar todo lo posible y recortaron de manera infame los presupuestos a salud, educación y vivienda. La epidemia actual está pasando una factura muy cara a las autoridades pues aunque afirman sin titubear que están preparados para cualquier contingencia, la vida cotidiana en los hospitales públicos muestra lo contrario. No hay medicamentos suficientes, no hay personal suficientes e incluso se acabaron los mascarillas, indispensables para el personal sanitario. El Secretario de Economía, Agustín Carstens anunció que México pidió un préstamo al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional de 25 millones de dólares para enfrentar la epidemia.
Al perro más flaco le caen más pulgas
Los mexicanos, en especial los habitantes de la capital, han sufrido mucho por la carestía, el desempleo, cortes al suministro de agua, la inseguridad. La población está en medio de un fuego cruzado entre los narcotraficantes y las fuerzas del orden. Y ahora, una epidemia que ataca con virulencia a los jóvenes, corona el pastel.